Cansados de la persecución policial, los controles selectivos, las detenciones arbitrarias, las vivencias propias y ajenas de malos tratos, torturas y amenazas, sumado a la desaparición de personas y los casos de gatillo fácil en los que la policía se ve habitualmente envuelta, un grupo de jóvenes, autodenominados Colectivo de Jóvenes por Nuestros Derechos, decidieron nueve años atrás organizarse y marchar para exigir el cese de estas prácticas y la derogación de la herramienta legal que le permite al aparato represivo llevarlas adelante sin obstáculo alguno: el Código de Faltas cordobés.
Así fue que se llevó a cabo la primera Marcha de la Gorra, con una convocatoria que jamás hubiera hecho prever que nueve años después iba a ser la protesta social de carácter antirrepresivo más grande y sistemática del país, convocando alrededor de 25.000 personas.
La respuesta del gobierno delasotista siempre fue la confrontación chicanera y la criminalización de la protesta, como sucede con cualquier tipo de reclamo en la provincia.
A continuación, compartimos el registro visual de esta novena Marcha de la Gorra, junto a fragmentos del documento elaborado por la comisión organizadora conjuntamente con todas las organizaciones que participan en la marcha.
«Somos nosotros y nosotras. Somos los pibes y las pibas de los barrios, de los bailes y las canchas, de las cárceles de todo el país. Somos las trabajadoras y los trabajadores que luchamos todos los días por la dignidad; que soportamos la explotación, el salario bajo y la represión de la cana cuando protestamos.
Somos las trabajadoras sexuales históricamente criminalizadas, asesinadas en la clandestinidad, golpeadas y perseguidas por los gobiernos que son cómplices de los responsables de la trata y el proxenetismo.
Somos las y los estudiantes que luchamos por la educación pública, gratuita, de calidad y laica. Somos artesanos y artesanas, carreros, somos quienes impedimos que Monsanto se instale en Córdoba y quienes luchamos para que Porta se vaya de nuestros barrios.
De la Sota estás equivocado: Somos familiares y amigxs de víctimas de gatillo fácil, nunca de los policías que se roban armas y las plantan en los barrios, ni de los asesinos comandados por delincuentes como vos y Julio César Suárez.
Somos la Marcha más grande y sistemática de Córdoba, y del PAÍS, que reivindica nuestras culturas populares y repudia rotundamente este Estado policial que nos excluye, nos reprime, nos persigue, nos estigmatiza y nos mata.
Somos la Marcha de la Gorra.
Al igual que al accionar policial y judicial, repudiamos a las corporaciones mediáticas por construir y legitimar este modelo de seguridad, con discursos que criminalizan a las víctimas y justifican el abuso de la fuerza o incluso los crímenes de la Policía. En contraposición, celebramos todas aquellas expresiones comunicacionales que nacen y se construyen desde el campo popular.
Repudiamos los linchamientos. No es justicia por mano propia, son asesinatos. Estas conductas son el reflejo de la decadencia del régimen político y social. Los que gobiernan ese régimen son los responsables y sus modelos represivos dividen a unos y otros. Llamamos a acabar con esta aberrante violencia que se agudizó durante el atrincheramiento policial, entre otros casos.
Esta marcha repudia toda tipo de represión venga del gobierno que venga.
En ese sentido nos pronunciamos por la derogación de la Ley Antiterrorista, una de las peores Leyes sancionadas en democracia que criminaliza la protesta social.»
Fotos: Facundo Moya