La prosa como una forma de acelerar el ritmo poético y entrecruzar géneros. En Oscuras flores del duelo (Conejos, 2022), Patricio Foglia propone una historia fragmentada, en donde el filo de la poesía se encarga de dar lugar a la fe, a lo profano y a la ausencia. ¿Qué más necesario que una santería cuando todo lo demás se derrumba? ¿Qué relación más intrínseca existe que la del amor y la muerte? ¿Qué lugar ocupan los que todavía no se fueron?
Sobre el autor
Patricio Foglia nació en 1985 en Buenos Aires. Publicó Temperley, Lugano 1 y 2, La escafandra, Tokio, Todo lo que sabemos del cielo y la nouvelle Oscuras flores de duelo. Antologó Los fuegos de Orc (antología de poesía argentina y ciencia ficción) y Una marca de nacimiento (poesía y filiación). Tradujo, junto con Natalia Leiderman, Salto del ciervo (Sharon Olds), El pájaro rojo y El trabajo del sueño (de Mary Oliver). Fue guionista del podcast Mostras – Maestras de la Poesía argentina.
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1.
Un vecino dijo Hoy, tener dinero en la mano es lo mismo que tirarlo por la ventana. Y yo pensé, eso es lo tengo que hacer: tirarlo por la ventana, como una ofrenda al cielo, para salir adelante. Mamá estuvo de acuerdo. De alguna forma, fue ella la que me impulsó en esta pasión, este mundo increíble, el del espíritu.
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2.
Al principio fue difícil. Pero la gente nos necesitaba. Esto es así, en esa época, ahora y dentro de mil años. La gente siempre necesita algún tipo de asistencia: algo en lo que creer. No lo digo como comerciante, lo digo como mediador. Entre los problemas cotidianos, que son tantos; a veces hay historias tan desgarradoras, historias que madre mía y la solución posible, la santa compañía te da la esperanza. Lo mejor, y a veces lo único posible, es prenderle una vela a los santitos, rezar y esperar a ver qué pasa.
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3.
Todo lo que sucede, sucede en un río, flotando entre olvido y memoria y yo no sé si seré capaz de reconocer a mi mamá, a mi papá o a Furia cuando volvamos a cruzarnos, pero sé que va a pasar y a volver a pasar, una y otra vez.
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4.
Dos hilos enlazados tejen el universo: amor y muerte y dentro de la muerte, el amor; y dentro del amor, la muerte. En esta trama existe lo que existe y a cada quien le toca en suerte ser araña paciente o insecto atrapado, de acuerdo a cada ciclo, en cada momento, de cuando en vez.
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5.
Miente quien dice no conozco el Paraíso. Todo el mundo conoce el Paraíso pero a la mayoría no le importa, o se lo olvida. Yo elegí instalarme, atento a mis sueños, abierto el ojo de la infancia.
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