LatFem y Maten al Mensajero publicaron una antología de historietas feministas que las contextualiza como parte de un movimiento que crece y toma cada vez más fuerza dentro del terreno de la ilustración y el humor gráfico. De esta maneta, Fantástica violeta es una selección que logra dar muestra de de toda su potencia.
Por Tamara Grosso*
Como explican Mariela Acevedo y Daniela Ruggeri en el prólogo a Fantástica Violeta (LatFem y Maten al Mensajero, 2020), hace un tiempo que en el terreno de la historieta se está desarrollando una “revuelta en el patio de juegos” que tiene que ver con la toma de espacios desde las identidades feministas y disidentes. Este libro invita a encontrarse con esa prolífica producción.
Kiti López, ilustradora de LatFem; Elizabeth Lerner, editora de Maten al Mensajero, y la dibujanta Jazmín Varela seleccionaron diez trabajos para formar parte de esta antología, realizados por Malena Guerrero y Alejandra Benz, Julián Gabriel, Paula Sosa Holt, Angie Cornejo, Pinesca, Paula Ferraro y Lucía Vera, Rouse, Titihoon, Juana de Marco, Estrella Mergá y Pepita Sandwich como invitada especial.
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Acevedo y Ruggeri cuentan que la revuelta surgió a partir de “autorxs que comenzaron a juntarse para publicar porque no encontraban espacio en las publicaciones o medios existentes, y que lo siguieron haciendo a pesar de la hostilidad inicial”, contra la que tuvieron y siguen teniendo que hacer frente.
Acevedo y Ruggeri cuentan que la revuelta surgió a partir de “autorxs que comenzaron a juntarse para publicar porque no encontraban espacio en las publicaciones o medios existentes, y que lo siguieron haciendo a pesar de la hostilidad inicial”, contra la que tuvieron y siguen teniendo que hacer frente. Así, “las historietas que aquí se compilan tienen un recorrido por hacer pero también tienen una trayectoria detrás: le hablan a un movimiento heterogéneo, plural, de autorxs, editorxs, lectorxs de una historieta disidente que se plasma en antologías, espacios virtuales y ferias.”
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Fantastica violeta (Latfem y Maten al mensajero, 2020)
El libro también cuenta con una nota introductoria de LatFem y Maten al mensajero, que afirma que “los cuerpos son potencias que no conocen la idea de normalidad ”. Esto es lo que puede encontrarse en las once historietas que forman parte del libro. En “Gorda”, con textos de Alejandra Benz y dibujos de Malena Guerrero, por ejemplo, la protagonista, discriminada en una obra social por su peso y después de escuchar opiniones sobre su cuerpo durante todo el día, dice: “Este es mi cuerpo y existe, no estoy gorda, soy gorda. Y me van a escuchar. En esta lucha, también la vergüenza tiene que cambiar de lado”.
El libro también cuenta con una nota introductoria de LatFem y Maten al mensajero, que afirma que “los cuerpos son potencias que no conocen la idea de normalidad ”. Esto es lo que puede encontrarse en las once historietas que forman parte del libro.
En “Tatuaje”, de Paula Sosa Holt, los cuerpos aparecen tatuados y el lema es “me gusta tener dibujitos en la piel, siento que tengo el control sobre mi cuerpo”. En “Odisea en el orgasmo”, de Estrella Mergá, no hay palabras, solo cuerpos que gozan.
La potencia de estos cuerpos y de estos dibujos para oponerse al orden patriarcal hacen que en este libro haya puramente goce, tanto para lxs lectorxs como seguramente en el proceso en el que se produjo, y en el movimiento más amplio del que forman parte.
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