Esta semana arrancó la tercera edición del Festival de Arte Trabajador organizado por RADAR, organización que nuclea a numerosos sindicatos y sus producciones culturales. La Primera Piedra entrevistó a Nicolás Di Giusto, secretario de Cultura de Sadop – Capital, a propósito de la apertura y las actividades planificadas para este año.
— Es la tercera edición del Festival de Arte Trabajador, ¿cuáles son los principales desafíos para este año?
— A partir de las ediciones anteriores del Festival de Arte Trabajador hemos transitado y disfrutado de una enriquecedora experiencia de generar un ámbito donde nuestrxs afiliadxs han podido experimentar y mostrar sus expresiones artísticas en el marco de las organizaciones sindicales. Dentro de las evaluaciones de las mismas hemos comprendido que no todas las organizaciones tienen afiliadxs que se expresen a través de las disciplinas que componen las artes escénicas y por eso hemos evaluado la necesidad de poder incorporar otras disciplinas en el Festival 2019: cine, fotografía, artes plásticas.
— ¿Cómo se debatió/decidió la cláusula general de paridad de género y qué importancia le otorgan en el marco del auge del movimiento feminista y LGBTIQ+?
— También evaluamos la necesidad de incorporar una cláusula general de paridad de género en el marco de la totalidad del Festival, pero no hubo necesidad de ningún debate, ya que se dio naturalmente. Quienes conformamos RADAR tenemos una visión muy clara de la necesidad de sostener las reivindicaciones del movimiento feminista en su conjunto y es por ello que la igualdad de género, no solo en lo artístico sino en el mundo del trabajo y de nuestras propias organizaciones, es una temática que nos atraviesa continuamente.
— El Festival está organizado por RADAR de los Trabajadores. ¿Cómo definirían este espacio y cuáles son sus principales objetivos en el ámbito de la cultura y el trabajo?
— RADAR de los Trabajadores es un espacio que nace con el objetivo de poner en red la producción cultural de los sindicatos que lo integran. RADAR es fundamentalmente un espacio de intercambio, articulación y producción para registrar, comunicar, difundir y compartir entre todxs la enorme y extensa labor que se desarrolla en estas áreas. Es en el campo de la cultura donde se libran las batallas por la imposición de sentidos. El sentido hegemónico se impone instalando la idea de que sólo el tiempo “productivo” es el que vale, y que vivimos en un mundo donde la ley del más fuerte es la única que puede ordenar la realidad.
— ¿Cómo se concibe el campo artístico desde la organización?
— Desde RADAR entendemos que el arte, en tanto forma de la cultura, es un dispositivo a través del cual podemos crear otros mundos posibles y disputar espacios en la construcción de ideas y sentidos. Esto sucede porque la creación artística y la experiencia como espectadores genera otras formas de relacionarnos. Los tiempos se trastocan y la propuesta invita a dejar de lado la hegemonía de la razón y dar lugar a otras formas de transitar la vida. El arte es la prueba de que otros mundos son posibles y que solo en comunidad podemos crearlos.
— ¿Cómo ven el panorama actual y las políticas nacionales con respecto a estos dos ejes: cultura y trabajo?
— Vemos un retroceso muy grande en los dos aspectos. Este proyecto nacional vino con el objetivo de restaurar el orden oligárquico conservador. Vino a atacar al movimiento obrero, a sus organizaciones y derechos conquistados a lo largo de la historia. En este sentido el RADAR de los Trabajadores es una experiencia de unidad en la acción y en la resistencia. Respecto a la política cultural, un ejemplo claro es la degradación del Ministerio de Cultura al rango de secretaría, la falta de financiamiento en todas las instituciones y organismos nacionales relacionados a la cultura, la sub ejecución de las míseras partidas presupuestarias destinadas a la Cultura. Desde el Festival queremos dar nuestro aporte para revertir este panorama y enunciar que las organizaciones sindicales tienen propuestas al respecto.
— Las entradas de los espectáculos serán a la gorra. ¿Cuál es la concepción del Festival en torno al artista en tanto trabajador?
— Todas las funciones son a la gorra porque el Festival nace en 2017 como grito de resistencia, como una respuesta a distintas necesidades. Por un lado, la necesidad de tener espacios de expresión; por eso abrimos nuestras salas. Por otro lado, la necesidad de momentos recreativos que se han vuelto prohibitivos. Por eso a la gorra, para que todxs tengan acceso a disfrutar de las expresiones artísticas que se dan cita en el Festival. Pero al mismo tiempo entendemos que lxs artistas son trabajadores y, si bien desde el Festival se garantiza una logística para que la función no les implique incurrir en gastos, han tenido horas de ensayo, gastos de puesta en escena, viáticos, vestuarios, escenografías y una entrega personal que deben ser reconocidos.
— Por primera vez se entregarán premios en la ceremonia de cierre. ¿Cuáles será los aspectos valorados en la selección?
— Los galardones están pensados para homenajear a las personalidades de la cultura nacional que son fundamentales para el movimiento obrero y sus organizaciones, quienes a lo largo de su trayectoria han acompañado las luchas del pueblo trabajador en la conquista y defensa de sus derechos. Es por eso que en esta edición las organizaciones que conformamos RADAR definimos otorgar estos reconocimientos. Más que premios, son homenajes. No son premios a las obras del Festival, porque entendemos que cada obra es única y no puede ponerse en situación de competencia con respecto a otras. A través de los premios a estas personalidades, queremos reivindicar a la Cultura en general como parte de la identidad de nuestra Patria.
— ¿Qué otras novedades trae esta edición y cuáles son las expectativas?
— Otra novedad es haber abierto las puertas de nuevos centros culturales y teatros que nos solicitaban presentar las obras de RADAR en sus espacios y es por eso que en esta edición ampliamos la cantidad de espacios donde toda la comunidad va a poder disfrutar de las expresiones artísticas realizadas por los trabajadores. La expectativa es que la gran afluencia de público demuestre que las organizaciones sindicales abarcan mucho más que el ámbito gremial; son un andamiaje fundamental en la batalla cultural por la identidad de nuestro pueblo.