El caso Santiago Maldonado puso en alerta a la democracia argentina. A 4 meses de la brutal represión de Gendarmería Nacional, en la comunidad mapuche de Pu Lof en Cushamen, que culminó con la desaparición y muerte del joven, en La Primera Piedra nos hacemos diferentes interrogantes para determinar lo que más importa para conseguir verdad y justicia: ¿Qué pasó con Santiago Maldonado? (Fotos: Gustavo Yuste)
¿Qué pasó el 1 de agosto de 2017?
Los efectivos de Gendarmería Nacional irrumpieron con violencia en la comunidad mapuche Pu Lof en Cushamen, Chubut. La fuerza estatal tenía la orden de la justicia de despejar la ruta 40 donde se llevaba adelante la protesta que exigía la liberación del líder mapuche Facundo Jones Huala. Sin embargo, ingresó ilegalmente y de forma violenta a la comunidad persiguiendo a los manifestantes, entre los que se encontraba Santiago Maldonado.
Si bien el operativo, como dijimos, fue ilegal, los gendarmes decidieron ingresar con la justificación de perseguir una “flagrancia” para detener a los que cortaban y porque les estaban arrojando piedras. El uso de esta figura para detener a los manifestantes fue «definido como una estrategia conjunta con las fuerzas de seguridad federales y locales, en los días previos por el jefe de gabinete del Ministerio de Seguridad, Pablo Noceti», tal como explica el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS).
Más de 50 efectivo ingresaron al territorio y permanecieron allí casi seis horas. Cuando el operativo terminó, faltaba Santiago Maldonado. Tanto la comunidad como la familia denunciaron, en un primer momento, su desaparición considerando la posibilidad de que hubiera sido detenido. El pedido por su aparición comenzó a ser más insistente a medida que las horas y los días comenzaron a pasar sin una explicación oficial.
¿Qué hizo el Poder Ejecutivo para esclarecer el caso?
Desde el comienzo, los funcionarios del Poder Ejecutivo, con Patricia Bullrich a la cabeza, plantearon diversas hipótesis que no tenían sustento real con el fin de instalar que Maldonado no estaba en la comunidad al momento de ser reprimida, que se había escapado sin comunicarse con ningún familiar y amigo o que había muerto días anteriores. A su vez, estos funcionarios ocultaron cómo había actuado Gendarmería en la represión y encubrieron los datos que faltaban en los registros y, por lo tanto, en la investigación posterior.
Nunca se buscó efectivamente a Santiago Maldonado, por acción directa o por falta de voluntad, no hubo intención de esclarecer el caso. Ni desde el Ministerio de Seguridad ni del Poder Ejecutivo fue prioridad estatal involucrarse en la resolución del caso. Mientras Santiago Maldonado no aparecía, el gobierno se empeñó en atacar a la familia y organismos de Derechos Humanos, y criminalizar a la comunidad mapuche.
¿Cómo actuó el Poder Judicial?
La respuesta judicial a la denuncia por la desaparición y la presentación de diversos Habeas Corpus llegó tarde. El Poder Judicial demoró en activar la búsqueda de Santiago Maldonado y la investigación de las posibles responsabilidades de Gendarmería. Al comienzo no le dieron credibilidad a la denuncia ni tampoco intervinieron de inmediato para saber si la desaparición era consecuencia de la represión.
Muchos días pasaron en el medio desde el 1 de agosto hasta que se comenzó efectivamente con la investigación sobre lo que había sucedido durante el operativo represivo y rastrillaron por primera vez la zona en la que se había llevado adelante la represión. Recién el 15 de agosto fueron allanados los escuadrones para secuestrar elementos relevantes, por ejemplo. De forma paralela, la fiscalía recaratuló la causa penal como “desaparición forzada”.
En el medio se apartó al juez Guido Otranto, tras el pedido de recusación de la familia por demostrar poco interés en acelerar la investigación y parcialidad. Con la sucesión del juez federal Gustavo Lleral, quien tuvo otra estrategia hacia la comunidad y la familia que el magistrado anterior, se hizo posible el ingreso al territorio el 17 de octubre, día en el que se encontró el cuerpo de Santiago Maldonado tras 77 de incertidumbre.
¿Qué consecuencias tuvo confirmar la muerte de Santiago Maldonado?
Tener el cuerpo permitió, en parte, cerrar parte de la historia que debería permitir abrir una investigación que investigue qué fue realmente lo que sucedió con Santiago Maldonado tras la represión, porque no estaba paseando por el río sino que la última vez que se lo vio con vida huía de la represión de Gendarmería Nacional. Esto, como mínimo, debería permitir investigar qué sucedió desde el 1 de agosto que desapareció Santiago al 17 de octubre que se encontró el cuerpo.
Por otro lado, esa misma muerte permitió al Gobierno Nacional sellar el caso, acompañado de los grandes medios de comunicación que se encargaron de encubrir y tergiversar la información que existía sobre la desaparición y posterior muerte, para intentar instalar la idea de que murió solo y que el Estado no tuvo ninguna responsabilidad en el hecho. Negando la realidad de que Maldonado murió tras una represión en la que se lo vio huyendo de la fuerza represiva estatal.
Por su parte, la gran visibilidad que adquirió el reclamo debería haber generado un repudio general de la sociedad contra una muerte en la que el Estado es el asesino. Sin embargo, muchos sectores percibieron su muerte como un accidente sin responsabilidad estatal o, peor aún, como correcta, poniendo en peligro los fundamentos básicos de la democracia argentina. No obstante, muchos otros sectores de la población, tras la confirmación de su muerte, siguen preguntando aún con más fuerza ¿qué pasó con Santiago Maldonado?
¿Qué resultados brindó la autopsia?
Los resultados de la autopsia realizada al cuerpo de Santiago Maldonado determinaron que el joven murió por “asfixia por inmersión” ayudada por hipotermia y que su cuerpo estuvo en el río Chubut, el lugar en el que fue encontrado, entre 53 y 72 días por lo que no se determinó con exactitud la fecha de muerte. Estos datos solo permiten confirmar que Santiago Maldonado intentó cruzar el río para escapar de la brutal represión.
¿Por qué el Estado es responsable en la desaparición y muerte de Santiago Maldonado?
Santiago Maldonado, como dijimos, huía de la represión de Gendarmería Nacional la última vez que se lo vio con vida, represión ilegal, dirigida y apañada directamente bajo la mirada del Poder Ejecutivo, con Pablo Noceti, jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad a cargo. La información arrojada por la investigación, la autopsia y los testimonios, sigue señalando al Estado como el principal responsable.
Además, desde el primer día de la desaparición de Santiago Maldonado, el gobierno nacional con sus funcionarios colaboraron en encubrir y no investigar la única hipótesis concreta: su desaparición forzada en manos de Gendarmería Nacional, fuerza comandada por Patricia Bullrich, ministra de Seguridad. El gobierno nacional nunca asumió su responsabilidad e hizo todo lo posible por encubrir el accionar represivo estatal.
Por su parte, el caso de Santiago Maldonado es necesario entenderlo en el marco de un Estado que nunca dejó de reprimir tras la dictadura cívico-militar. En este sentido, la desaparición y la muerte son elementos que persisten en el accionar de las fuerzas de «seguridad» argentinas, por lo que el caso de Santiago Maldonado no escapa a esta lógica. Además de la persecución y hostigamientos que recibe la comunidad mapuche, en la que se encontraba el joven, desde la recuperación de su territorio por parte de las fuerzas estatales.
¿Qué pasó con Santiago Maldonado?
Santiago Maldonado murió tras participar de una protesta que fue brutalmente reprimida. Pasaron 77 días hasta que encontraron su cuerpo y la investigación aún no aparta a los principales implicados de la represión ni tampoco profundiza indagando sobre el encubrimiento posterior. El Estado, mediante los funcionarios del Gobierno nacional, en lugar de proteger a la víctima y a su familia, se dedicó a encubrir y deslegitimar a la familia y a la comunidad mapuche que fue vulnerada y reprimida.
¿Qué pasó con Santiago Maldonado? Es un interrogante que continúa sin respuesta.
