«Desesperados hicimos honor/ a todas las religiones» se lee en uno de los poemas de Rodrigo Armoa, también conocido como @poetavillero en las redes sociales. Con una gran batería de influencias, que pueden ir desde un estilo barrial a un coqueteo con la poesía lírica, los textos que integran «Descanso sobre ruinas» (Continente, 2021) arman un mapa sobre lo inestable, sobre los escombros de lo que en algún momento se juró interno.
Sobre el autor
Rodrigo Armoa nació en el barrio San Cayetano, Beccar, Provincia de Buenos Aires. Publicó poemas desde 2018 en sus redes sociales bajo el seudónimo «Poeta Villero», nombre artístico que acerca sus escritos a la realidad que atraviesa. Editó y publicó su primer fanzine autogestivo Escribir es resistir (2018).
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1 – Hemisferio Sur
Me di cuenta que estaba perdido
cuando mi diablo se puso de tu lado
tu sonrisa tibia se proclamaba
reina de la fiesta
me ofreciste beber del cáliz
y recostado sobre una nube de humo
la noche se volvió cotillón
la vida y la muerte se dan la mano
vos partís en dos la coraza
te deseo/ alteza/ te deseo
y viceversa
probé tu crisantemo
el roció regó mi jardín
desesperados hicimos honor
a todas las religiones.
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2 – Villa Crespo 4 A.M.
Una ruta doble mano
inútil
un barrio del que nadie vuelve
beso una estatua de oro
ㅤㅤfilo
tengo los labios nerviosos
la muerte tiene lista de espera
uno de los está soñando
me voy de tu cordillera
escondo un manojo de escarcha
ㅤㅤtentación
no creo en la magia
creo que los lobos
son más amigables que la carne.
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3 – Kamikaze
Prendí fuego mi cama
ahora no tengo dónde dormir.
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Descanso sobre ruinas (Ediciones Continente, 2021), de Rodrigo Armoa
4 – No soy un pibe cualquiera
¿Cuál es la verdad?
al fin y al cabo soy
todas las verdades
acaricio el hielo
tibio rock and roll de niños que
saben bailar
visten lindos trapos para llorar
se caen sus versos por el bolsillo roto
de un neceser
¿mi pelo va con la ocasión=
son todos muy hermosos
eso los hará menos poetas
ofrezco mi corazón
eso me hará menos hermoso.
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5 – Psicología inversa
Tengo otra idea: esperar
en el andén equivocado
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