Cinco hospitales públicos de la Ciudad de Buenos Aires serán concentrados en un único edificio según el decreto publicado por el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. Sin pasar por el debate legislativo (y a pesar del fuerte rechazo de los trabajadores de la salud), el proyecto que propone la unificación de los hospitales Marie Curie, Ferrer, Udaondo, IREP y Muñiz está en marcha.
Al igual que sucedió con la UNICABA (el proyecto que propone la unificación de los institutos de formación docente porteños en una universidad), la idea del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de concentrar cinco hospitales públicos en un único centro de salud fue recibida con rechazo desde el comienzo. A pesar de las movilizaciones de trabajadores de la salud, abrazos simbólicos y argumentaciones de profesionales, el lunes pasado el Jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, aprobó por decreto la creación del «Complejo Hospitalario Sur».
A pesar de las movilizaciones de trabajadores de la salud, abrazos simbólicos y las argumentaciones de los profesionales, el lunes pasado el Jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, aprobó por decreto la creación del «Complejo Hospitalario Sur»
Este proyecto plantea la unificación de cinco hospitales públicos (el Hospital de Infecciosas Francisco Muñiz, el de Gastroenterología Carlos B. Udaondo, el de Rehabilitación Respiratoria María Ferrer, el de Oncología Marie Curie y el Instituto de Rehabilitación Psicofísica) en el predio donde actualmente funciona el Muñiz, creando un único espacio donde se concentre la atención sanitaria de la Ciudad. El decreto prevé la creación de una Unidad de Proyectos Especiales (UPE) dentro del Ministerio de Salud de la Ciudad que se encargará de organizar el proyecto de unificación de los hospitales, de su financiación y de definir cómo se reasignarán los recursos humanos.
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La oposición al proyecto de Larreta se centra en dos conflictos centrales: uno relacionado a los puestos de trabajo capacitados, y otro a una cuestión sanitaria. Por un lado, los trabajadores reclaman que no habrá lugar para todos en el nuevo complejo hospitalario, y temen que la mudanza derive en un fuerte ajuste de personal capacitado en el área. El antecedente de los despidos masivos en el Hospital Posadas no deja tranquilos a los trabajadores, que aún después de la firma del decreto no fueron contactados por los responsables de la mudanza. Por otro lado, se denuncia que el proyecto no considera el riesgo que podría traer que convivan pacientes con cáncer y enfermedades infecciosas, respiratorias y gastroenterológicas, junto con personas en proceso de rehabilitación psicofísica.
La oposición al proyecto de Larreta se centra en dos conflictos centrales: uno relacionado a los puestos de trabajo capacitados, y otro a una cuestión sanitaria.
Otra de las críticas se refiere al posible negocio inmobiliario que resultará de esta decisión gubernamental. El proyecto aprobado por decreto implica la venta de los terrenos donde actualmente se encuentran los cuatro hospitales que serán trasladados para financiar la construcción del nuevo complejo. Parte del rechazo se centra en la falta de cuidado y presupuesto que actualmente (y durante los últimos 12 años de gestión del PRO/Cambiemos en la Ciudad) se da a las instituciones, que busca ser remediado con obras millonarias luego de años de abandono.
NO AL 5X1. NO AL CIERRE DE HOSPITALES.Defendamos la salud pública, las fuentes de trabajo y a los pacientes de los hospitales que van a trasladar por decreto.
Salud pública de calidad hoy y siempre@lehalperin @InesGorbea @mpvischi @MGuouman @jfnosiglia @UCRMujeresCABA pic.twitter.com/iUoLu8rSbS— María Alejandra (@alegara83) 21 de septiembre de 2018
