El libro Plaza Sinclair (Conejos, 2018) de Jorge Consiglio propone una poética atenta tanto a los detalles visibles como a los intangibles. Con una voz propia, nutrida de adjetivos sonoros y pensados, los poemas del autor describen lugares y personas a las que el paso del tiempo afecta de una manera entre sórdida y cinematográfica gracias a la fuerte impronta observacional que caracteriza a estos versos.
Sobre el autor
Jorge Consiglio nació en Buenos Aires, en 1962. Es Lic, en Letras en la Universidad de Buenos Aires y profesor de Semiología. En 2003 publicó su primera novela El bien, que recibió el Premio Nuevos Narradores de la Editorial Opera Prima de España. Le siguió Gramática de la sombra en 2007, ganadora del Tercer Premio Municipal de Novela); Pequeñas intenciones, en 2011, Segundo Premio Nacional de Novela y Primer Premio Municipal de Novela y Hospital Posadas, en 2015; entre otros libros.
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Una poética de la observación
El paso del tiempo compone y descompone de manera simultánea. Casi todo lo que se forma surge de otra descomposición previa y así el mecanismo de la vida se reproduce. Este clima puede encontrarse en Plaza Sinclair (Conejos, 2018) de Jorge Consiglio, donde una poética de la observación se centra en los detalles visibles y también en los intangibles, estos últimos que se caracterizan por ser los espacios donde la poesía pisa fuerte.
«Canta,/ como si planteara una ética,/ entre macetas rotas/ y cajones de cerveza», escribe el autor en uno de los primeros poemas del libro para adelantar el clima que se mantendrá durante todo Plaza Sinclair: la convivencia entre los objetos, ese decorado que complejiza todas nuestras acciones, y la cuestión interior siempre convulsa. En la misma dirección, en el poema «Espesura», se puede leer: «La naturaleza proclama/ la existencia de cosas/ que no parecen terminar jamás».
Hay un tono medido a lo largo de los poemas de este libro, donde la voz poética de Consiglio se nutre de adjetivos puestos a conciencia en los poemas. Así como en la primera página del libro se repite «recóndita», en otros poemas el lector se encuentra con expresiones del tipo «sábanas córneas», «desnudo, concreto e italiano» (en un claro guiño al «individuo seco, tabacoso y argentino» de Joaquín Giannuzzi), o «la oscuridad perfecta/de las pupilas/ de una mujer/ que conozco».
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Dividido en tres partes («Los cuadernos de Gari, «El viaje de Gari» y «Las cenizas del insomnio»), el libro logra una continuidad seductora a través de sus hojas, soportando a su vez un pasaje de la tercera persona lejana a la intimidad de un yo poético en el último apartado. Ese cambio de enfoque, de todas maneras, no cambia la búsqueda del libro: «Es el ojo clandestino,/ el que pervierte,/ el que evalúa/ los centímetros de distancia/ para no fallar en el ataque», se lee en esa dirección.
Con una atmósfera narrativa y profundidad poética, Plaza Sinclair de Jorge Consiglio es un libro para ver y reconocer el paso del tiempo en su sordidez y en su constante regeneración. No es casualidad, entonces, que los últimos versos del poemario sean tan contundentes: «De allí, quizás,/ la conclusión kafkiana/ de que no hay viaje,/ por corto que sea,/ que no resulte indeterminable».