El martes 7 de noviembre se conoció la sentencia por el «Juicio a los Magistrados», que tenía lugar en Córdoba desde el mes de julio de este año. Este proceso era el primero en la provincia que juzgaba a integrantes del Poder Judicial por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura cívico-militar. Sin embargo, de los cuatro imputados, dos de ellos fueron absueltos y los otros dos recibieron condenas menores. (Fotos: Facundo Moya)
Se conoció la sentencia por el «Juicio a los magistrados», proceso judicial que se estaba llevando adelante en Córdoba desde el 25 de julio de este año y que investigaba los delitos de “abuso de autoridad, violación a los deberes de funcionario público, incumplimiento y encubrimiento” de cuatro ex funcionarios judiciales en la totalidad de 119 hechos cometidos contra 75 víctimas en el centro clandestino de detención denominado UP 1 en 1976.
(Leer nota: Juicio a los magistrados en Córdoba: seguir juzgando la complicidad civil del genocidio)
Como mencionamos anteriormente en La Primera Piedra, los abogados y las querellas de quienes fueron víctimas del accionar de los imputados aseguran que dichos funcionarios garantizaron la impunidad y se convirtieron en cómplices de los crímenes del terror implantado durante aquellos años. El Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOCF) N°1 de la provincia resolvió condenar a dos ex magistrados por su complicidad con la última dictadura cívico-militar de Argentina.
Miguel Ángel Puga, ex titular del Juzgado Federal N°2 de Córdoba, y Antonio Sebastián Cornejo, ex fiscal federal, son quienes recibieron las penas de tres años de prisión e inhabilitación absoluta por el término de un año por no haber impulsado las investigaciones por los delitos de lesa humanidad que sufrieron las víctimas del genocidio. A su vez, el veredicto del juicio absolvió al ex secretario del Juzgado Federal N°1 de la provincia, Carlos Otero Álvarez, y al ex defensor oficial, Ricardo Haro.
El Tribunal que dio la sentencia encontró a Puga y Cornejo responsables del delito de encubrimiento por infracción al deber de denunciar delitos, reiterado en cuatro ocasiones, sumado al incumplimiento de la obligación de promover la acción penal en un hecho. Los jueces del TOCF N°1, integrado por Julián Falcucci, José Camilo Quiroga Uriburu y Jorge Sebastián Gallido, fijaron el próximo 7 de diciembre para dar a conocer los fundamentos de la sentencia.
«En términos generales, la existencia de dos condenas ratifica la tesis de la Fiscalía sobre la responsabilidad de los acusados«, señaló el fiscal general Carlos Gonella, como se puede leer en fiscales.gob.ar, a pesar de que la Fiscalía General de la Nación había pedido penas entre dos y siete años para los cuatro imputados. «Estamos parcialmente de acuerdo con el veredicto, teniendo en cuenta que dos de los acusados por la Fiscalía fueron condenados a prisión efectiva – afirmó Gonella -, vamos a analizar con mucha atención los argumentos que el tribunal va a dar para fundar la absolución del acusado Carlos Otero Álvarez, respecto del cual, existen numerosos elementos de prueba consistentes de su responsabilidad en los hechos».
El «juicio a los magistrados” en Córdoba marca un hito a nivel local y, también, en todo el país. Así, los juicios de lesa humanidad siguen demostrando que muchos miembros del Poder Judicial participaron orgánicamente de la dictadura cívico-militar. Este juzgamiento a los funcionarios judiciales es el primer juicio en la provincia contra ex magistrados federales y la condena a dos de ellos, a pesar de las absoluciones y las cortas penas, es un avance en materia de condena judicial a la complicidad civil del genocidio tras 40 años de impunidad.
