En la emisión del pasado domingo de su programa Periodismo Para Todos, Jorge Lanata dejó varias frases para cuestionar. Más allá de la entrevista al Lonko Mapuche Jones Huala, con preguntas cargadas de desinformación, y los ataques a las comunidades de pueblos originarios, el periodista demostró una seria ignorancia sobre cuestiones relativas a los Derechos Humanos que un Estado debe respetar y sobre conceptos como el de «desaparición forzada» y «plan sistemático». Estas declaraciones son serias porque se trata de un comunicador que sale en el prime time televisivo y es visto por miles de personas.
Jorge Lanata dedicó su monólogo de la apertura de «Periodismo Para Todos» del último domingo a la desaparición de Santiago Maldonado pero no para exigir su pronta aparición con vida, sino para criticar a quienes hablan de desaparición forzada. Acá el primer error: el periodista analizó el caso y representó como «cínicos» a quienes sostienen que hay «un plan de desaparición de personas por parte del Estado», pero es necesario aclarar que nadie está hablando de un plan de desaparición de personas por parte del Estado respecto del caso de Santiago Maldonado. En todo caso se podría hablar de la planificación de la represión a los sectores populares por acción u omisión de todos los gobiernos constitucionales de 1983 a la fecha, incrementándose duramente en los primeros años de la gestión macrista, pero tampoco es a lo que se está refiriendo Lanata.
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Jorge Lanata le dedicó su monólogo de la apertura de Periodismo Para Todos del último domingo a la desaparición de Santiago Maldonado pero para no para exigir su pronta aparición con vida, sino para criticar a quienes hablan de desaparición forzada
El periodista aclaró: «La desaparición forzada de personas es un plan para que la gente desaparezca. ¿Creemos que Macri tiene eso?». No. Para la ONU se producen desapariciones forzadas siempre que: «Se arreste, detenga o traslade contra su voluntad a las personas, o que estas resulten privadas de su libertad de alguna otra forma por agentes gubernamentales de cualquier sector o nivel, por grupos organizados o por particulares que actúan en nombre del Gobierno o con su apoyo directo o indirecto, su autorización o su asentimiento, y que luego se niegan a revelar la suerte o el paradero de esas personas o a reconocer que están privadas de la libertad, sustrayéndolas así a la protección de la ley«, según la Declaración sobre la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas, proclamada por la Asamblea General en su resolución 47/133, de 18 de diciembre de 1992, como conjunto de principios que deben ser aplicados por todos los Estados.
Teniendo en cuenta esta definición es que se habla de desaparición forzada. Mientras que el gobierno sigue negando su responsabilidad en la desaparición de Santiago Maldonado, los testigos y las pruebas encontradas corroboran que los agentes de la fuerza federal subieron al joven a una camioneta de Gendarmería con destino, hasta el momento, incierto. Estos agentes actúan en nombre del Estado, porque son sus actores y funcionarios, además de que la misma represión fue comandada y dirigida por Pablo Noceti, el Jefe de Gabinete de Patricia Bullrich, Ministra de Seguridad.
Al momento de su monólogo sobre la desaparición de Maldonado, el periodista relacionó el canto que se escucha en las marchas contra el gobierno actual: «‘Macri basura, vos sos la dictadura’. Podés decir cualquier cosa de él pero no que es una dictadura. Y sí, en este caso defiendo al presidente, porque esto es una democracia, si no te gusta votá otra cosa». Es necesario aclarar una serie de cuestiones: el canto al que se refiere Jorge Lanata se escucha en las marchas desde las gestiones de Macri en la ciudad de Buenos Aires y, ahora, con su actual gestión en la Nación.
El mismo no refiere al tipo de gobierno que ejerce, sino más bien a sus relaciones con la dictadura: su familia se enriqueció fuertemente mientras sucedía el genocidio, sus vínculos empresariales se dieron con actores cómplices de la dictadura cívico-militar, varios funcionarios de sus gestiones defienden o niegan el terrorismo de Estado y las políticas económicas que están implementando son una continuación del plan neoliberal implementado desde el gobierno de facto con Martínez de Hoz a la cabeza. Por lo tanto, mezclar este canto con la desaparición de Santiago Maldonado solo tiene el fin de tergiversar su significado.
A su vez, Lanata insistió: «Algunos creen que hay un plan sistemático para desaparecer, que la Gendarmería se reunió y planeó esto, ¿les parece verosímil? Piensen un minuto las boludeces que dicen». En el mismo sentido que antes, nadie está hablando de un plan en el caso de Santiago Maldonado, pero tampoco se puede desconocer que la desaparición es una de las prácticas represivas que persisten como modalidad por las fuerzas de seguridad, al igual que la tortura y la muerte. De la misma forma que se habla de desaparición forzada en este caso, también lo fueron el resto de las más de 200 desapariciones en democracia por parte de los agentes estatales.
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Lanata insistió: «Algunos creen que hay un plan sistemático para desaparecer, que la Gendarmería se reunió y planeó esto, ¿les parece verosímil? Piensen un minuto las boludeces que dicen». Nadie está hablando de un plan en el caso de Santiago Maldonado, pero tampoco se puede desconocer que la desaparición es una de las prácticas represivas que persisten como modalidad por las fuerzas de seguridad, al igual que la tortura y la muerte.
El periodista del Grupo Clarín también sostuvo: «Si lo cagaron a palos y lo mataron se llama asesinato, no desaparición forzada de personas«. Otra vez: no. Asesinato se trata cuando personas civiles cometen un crimen. Si el asesinato lo cometen funcionarios estatales, es decir, agentes de las fuerzas represivas es una violación a los Derechos Humanos. Si la persona está desaparecida por el accionar de las fuerzas de seguridad y, encima, no reconocen su detención y el paradero de, en este caso Santiago Maldonado, es una desaparición forzada de personas, esté vivo o muerto.
Jorge Lanata acusa: «Es de un cinismo increíble hacer una campaña con esto. Es de hijo de puta decir eso. Vos podés decir que Macri gobierna para los ricos, cualquier cosa, pero no que chupa gente. Y no hay forma para rebatir esto cuando el argumento es insólito». Cinismo es salir al aire para defender la gestión de Patricia Bullrich que se niega a reconocer su responsabilidad en el hecho, demostrar un desconocimiento absoluto sobre el tema y los actores involucrados, exponer una falta de reconocimiento de las prácticas represivas en democracia y ningunear una desaparición forzada de persona.