La nouvelle La palabra Laura (Milena Caserola, 2016) de Anshi Moran posee un importante peso poético en donde descansa la trama. Sin ninguna pretensión de cumplir con las normas convencionales de una historia, la autora propone un relato donde los hechos, las imágenes y las sensaciones se van sucediendo y arman el camino de un amor que, como un fósforo, encandila para extinguirse en poco tiempo. Desordenada y repentina como la vida misma, esta novela breve experimenta el amor a través de lo más vital que tenemos: las palabras.
Sobre la autora
Anshi Moran es esc
ritora, editora independiente en la editorial Milena Caserola y estudiante de Letras en la UBA. Actualmente es co-conductora en Radio FLIA (Feria del libro independiente y a), un programa sobre literatura y cultura autogestiva contemporánea que produce junto a sus amigas y transmite desde FM La Tribu. Publicó textos en algunas revistas y fanzines independientes. Como editora, viajó por varias ciudades del país y el exterior. Le encanta escuchar poesía. La palabra Laura es su primer novela, publicada en la colección Ultra Cool (Milena Caserola 2016).
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El amor, la poesía y el desorden inevitable
¿Cómo nos enamoramos? ¿De qué nos enamoramos? ¿Por cuánto tiempo? Preguntas inútiles que no podemos dejar de hacernos en nuestro afán de controlar todo y reducir lo impredecible a su mínima expresión. Nunca lo logramos. La nouvelle La palabra Laura (Milena Caserola, 2016) de Anshi Moran se mete de lleno en una relación profunda y breve a través de un puente indestructible y al mismo tiempo endeble: las palabras.
Muchas veces enamorarse es un juego de significantes y significados que se van completando y entrecruzando durante el devenir de una relación. ¿Me gusta la otra persona por su real significado o por el que yo le adjudico? ¿Qué pasa cuando surge el primer mal entendido? Lo más probables es que todo el texto tiemble y hasta termine en un tacho de basura. La historia de Sara y Laura, dos jóvenes porteñas que se aman con la misma intensidad con la que intentan olvidarse, propone una experiencia lúdica y seria con las palabras a la hora de pensar un amor.
Sara, escritora principiante y enamoradiza aún más novata, se mete por los laberintos de una relación que no llega a comprender pero que intenta abarcar. Cada día se le propone como una nueva hoja en blanco donde de nada sirve el sentimiento de éxtasis de la noche anterior: siempre hay lugar para una nueva incertidumbre. Con un orden un tanto caótico, como la realidad, misma, esta novela mira con los ojos de Sara, quien, a su vez, ve a través del filtro de la literatura.
En ese sentido, no es casualidad que una narradora omnisciente tome las riendas de la historia por momentos para dialogar con la protagonista. En un extraño y seductor programa, Moran invita a bucear un amor psicológico y al mismo tiempo literario: «Laura te perdí. Te fuiste alejando de a poco, te fuiste metiendo adentro, tan adentro tuyo hasta desintegrarte del plano en el que yo podía abrazarte todavía».
Propia a su tiempo, La palabra Laura es una novela de amor a la que no le interesan los principios ni los finales, sino que pone su foco en los tormentosos mientras tanto. Descontracturada, desordenada y sin explicar lo que el lector puede llenar con su propia experiencia, esta breve novela habla del amor mediante la literatura y de la literatura mediante el amor. En palabras de Moran: «Como si no hubiese temáticas de las que hablar en la literatura, como si las historias estuviesen agotadas. Estoy agotada en algún plano de los muchos planos que ya no sé cual es cuál y si hay uno real y uno de fantasía o si se mezclaron».
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