«La idea del contacto directo con el lector que teníamos en la editorial fue un poco el germen de lo que hoy es la Feria de Editores», señala Hernán López Winne, editor de Ediciones Godot y creador junto a la editorial de este evento que tendrá su quinta edición el próximo sábado 6 y 7 de agosto en la Ciudad de Buenos Aires. «A mí no me gusta pensarlo en términos de disputa con la Feria del Libro porque es otra cosa distinta y de la cual no renegamos», afirma López Winne. Conocé más detalles en la siguiente entrevista.
En los últimos años, recogiendo quizás el impulso autogestivo de algunos escritores de los 90’s, se produjo un boom de editoriales independientes en distintos centros urbanos del país. La Ciudad de Buenos Aires, como no podía ser de otra forma, es la que encabeza este panorama. Con la idea de difundir nuevas voces y ampliar el juego dentro del cada vez más concentrado mercado editorial, estos sellos apuestan a un contacto mucho más cercano con el escritor y, sobre todas las cosas, con el lector.
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«La idea del contacto directo con el lector que teníamos en la editorial fue un poco el germen de lo que hoy es la Feria de Editores», comenta Hernán López Winne, editor de Ediciones Godot. Esta editorial independiente nacida en 2008 es la creadora de esta propuesta que desde hace ya tres años nuclea a diferentes sellos de distintos tamaños y estilos con la idea de crear un nuevo circuito de distribución y acercamiento con el público, sobre todo teniendo en cuenta los problemas que plantea la distribución y presencia en librerías para este tipo de editoriales.
Este año la cita será el sábado 6 y domingo 7 de agosto en la galería de arte Central Newbery (Jorge Newbery 3599, CABA), dando paso a la V edición
Este año, la cita será el sábado 6 y domingo 7 de agosto en la galería de arte Central Newbery (Jorge Newbery 3599, CABA), dando paso a la V edición que se autodefine de la siguiente manera: «Un espacio donde puedas charlar con los que hacen los libros. Que te cuenten la historia del autor, te recomienden otras lecturas, discutas sobre los libros que te gustan y lo mejor de todo compres con importantes descuentos».
-¿Cómo surgió la Feria de Editores?
-En el 2013 hicimos la primera. Por un lado, está la Feria del Libro en la que hay que estar por múltiples factores, pero el problema es que tener un stand ahí es muy caro. La única forma de estar en la Feria para este tipo de editoriales es estar en un stand colectivo, atenderlo vos mismo lo más que puedas, entre otras. Lo que veíamos con Ediciones Godot es que no había un espacio donde poder generar un contacto entre el escritor y el lector. La primera vez, hablamos con la gente de Radio La Tribu (Fm 88.7) y lo hicimos en su espacio. En la primera habrán ido 20 editoriales aproximadamente y fue un montón de gente la verdad, superó nuestras expectativas ampliamente.
-¿Qué sensación se llevaron las editoriales con esa primera experiencia?
-Estaban todas muy conformes porque habían vendido bien, que en definitiva era el otro punto clave a la hora de pensar la Feria de Editores: además del feedback con el lector, la posibilidad de ofrecer descuentos. A eso sumale también la entrada gratuita, que es algo muy importante.
La Feria del Libro es otra cosa y de la cual no renegamos. Sin embargo, lo que no encontrás en la Feria del Libro es lo que tratamos de hacer para la Feria de Editores. Por ejemplo, para este año armamos una serie de charlas con autores y editores. Más que disputa me gusta pensarlo como la creación de un nuevo espacio
-Para ustedes es muy importante que los stands estén atendidos por los propios escritores, ¿no?
-Sí, es la idea madre de la Feria: de cada editorial tiene que haber al menos un editor que esté ahí para charlar con ese lector y que este sepa que existe ese contacto para poder preguntarle cosas.
-¿Cómo se dio el salto cualitativo y cuantitativo para armar esta V edición?
-Con el paso del tiempo, nos empezaron a quedar muchas editoriales que querían participar afuera y también el lugar ya no nos alcanzaba. Así que, con Ediciones Godot, pensamos en hacer algo más grande en otro lugar y con una formato distinto, por eso alquilamos la galería de arte Central Newbery y planificar todo lo que se necesitaba. Eso implicó cobrar lo mínimo posible por el stand para cubrir los costos y ver qué recepción tiene eso dentro de las editoriales: en una semana se cubrieron todos los espacios. Pasamos de ser 35 editoriales en la última edición del 2014 a ser 75 esta vez. El año que viene veremos qué formato tendrá.
La idea madre de la Feria es que de cada editorial haya al menos un editor que esté ahí para charlar con ese lector y que este sepa que existe ese contacto para poder preguntarle cosas.
-¿Se puede pensar como un espacio de disputa con la Feria del Libro?
–A mí no me gusta pensarlo en términos de disputa con la Feria del Libro, para que no se cree una falsa idea de competencia o ansias de quitarle su lugar, porque eso no tiene sentido. La Feria del Libro es otra cosa y de la cual no renegamos. Sin embargo, lo que no encontrás en la Feria del Libro es lo que tratamos de hacer para la Feria de Editores. Por ejemplo, para este año armamos una serie de charlas con autores y editores. Más que disputa, me gusta pensarlo como la creación de un nuevo espacio para que aquel que al le gusten los libros sepa que, además de la Feria del Libro en abril y mayo, también está la Feria de Editores en agosto.
