Durante la madrugada del lunes, una patota de 20 personas vinculadas al empresario Mariano Martínez Rojas ingresó a la redacción del diario Tiempo Argentino y destrozó material de trabajo y archivo de los periodistas. El violento ataque al medio se dio luego de que los trabajadores decidieran conformarse como cooperativa tras meses sin cobrar sueldos debido al abandono de sus anteriores dueños: Sergio Szpolski y Matías Garfunkel. Conocé los detalles de este violento ataque a la libertad de expresión, en la siguiente nota.
El primer tweet que alertó sobre la situación desesperante que se vivía fue publicado a la 1:27 de la madrugada del lunes. Los periodistas que cubrían la guardia nocturna del diario Tiempo Argentino fueron sorprendidos por una patota de 20 personas que irrumpió en la redacción. Los agresores tapiaron las ventanas, atacaron a tres trabajadores y destruyeron material necesario para el funcionamiento del diario: cortaron cables, rompieron discos con información y destruyeron papeles de la cooperativa Por Más Tiempo, que maneja el diario Tiempo Argentino desde Abril de este año.
En la puerta de la redacción comenzaron a sumarse periodistas del diario y de otros medios que concurrieron en solidaridad con sus colegas de Tiempo Argentino. Durante 3 horas exigieron a la policía que actúe contra quienes estaban destruyendo sus herramientas de trabajo. Según un comunicado de la cooperativa Por Más Tiempo, el empresario Martínez Rojas y los agresores «fueron escoltados» hacia el exterior del edificio por la policía, a pesar de haber amenazado a los periodistas en su presencia. Ninguno de ellos fue detenido. Durante la mañana de ayer, Martínez Rojas y otros 10 sospechosos fueron imputados por los delitos de usurpación y daños.
Los periodistas que cubrían la guardia nocturna del diario Tiempo Argentino fueron sorprendidos por una patota de 20 personas que irrumpió en la redacción. Los agresores tapiaron las ventanas, atacaron a tres trabajadores y destruyeron material necesario para el funcionamiento del diario: Cortaron cables, rompieron discos con información y destruyeron papeles de la cooperativa Por Más Tiempo, que maneja el diario Tiempo Argentino desde Abril de este año.
El diario Tiempo Argentino era parte del Grupo 23, propiedad de los empresarios Sergio Szpolski y Marías Garfunkel, junto con otros medios como Radio América, Rock & Pop, Infonews y CN23. En diciembre del año pasado, los empresarios abandonaron el grupo y dejaron de pagar los sueldos a los trabajadores de los medios. En Tiempo Argentino decidieron conformarse como cooperativa en el mes de Abril, y continuar saliendo a la calle sólo los domingos. Los trabajadores de Radio América continuaron al aire a pesar de no cobrar sus sueldos y mantuvieron ellos mismos el alquiler y los impuestos. El mes pasado, el empresario Martínez Rojas los sacó abruptamente del aire y reemplazó la transmisión con música.
En diciembre del año pasado, los empresarios abandonaron el grupo y dejaron de pagar los sueldos a los trabajadores de los medios. En Tiempo Argentino decidieron conformarse como cooperativa en el mes de Abril, y continuar saliendo a la calle sólo los domingos. Los trabajadores de Radio América continuaron al aire a pesar de no cobrar sus sueldos y mantuvieron ellos mismos el alquiler y los impuestos.
Mariano Martínez Rojas afirma haberle comprado estos medios a sus anteriores dueños, pero no presentó los papeles necesarios ni tampoco intentó regularizar la situación de los trabajadores. Ellos nunca abandonaron sus puestos de trabajo. Las actitudes del empresario están lejos de demostrar respeto por la libertad de expresión. Desde la cooperativa a cargo de Tiempo Argentino reclaman al Estado que interceda en esta situación, para dar una respuesta a los trabajadores que intentan continuar con su rol de informar. Es necesario el repudio de la sociedad ante estos hechos, para que finalmente podamos ejercer el periodismo libremente en Argentina.
Hoy fue publicada una edición especial de Tiempo Argentino con cobertura de lo ocurrido ayer. En las redes sociales periodistas y lectores iniciaron una campaña con el hashtag #TodosSomosTiempo para comprar esta edición en apoyo de los trabajadores del diario.