Entrevista al elenco de Malviaje: “Somos como el Macbeth de lo under, pero con un fin sanador”

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Malviaje no entra en los límites de un género. Es un recital de poesía pero es, también, algo que lo excede: una puesta en escena que recorre las reminiscencias de una infancia transcurrida en los ’90, con una estética pop y colorida, intervenida por reversiones de canciones de Cristina Aguilera, Los Monracos y Shakira, así como también una experiencia que explora la presencia de los cuerpos en el espacio. Las temáticas ahondan en las emociones más profundas de la humanidad en un tiempo en donde los protagonistas luchan por encontrarse a sí mismos en una modernidad que los desborda. Los discursos se solapan constantemente, de a dos o de a cuatro voces, hasta entrar en armonía y unificarse en una único grito que es a la vez de protesta y de libertad.

Malviaje portada 2

Basada en el libro homónimo de poemas de Gael Policano Rossi (escrito en el 2009 y publicado en 2015 por el Centro de Producción artística La Postura conjunto a 45 minutos para un orador de John Cage) Malviaje es un diario de viaje autobiográfico y un reencuentro del autor con su vieja ciudad natal de Córdoba. La puesta en escena, dirigida por Alberto Antonio Romero (Beto), es la segunda parte de una serie de materiales que el elenco (Ana Capalbo, Gianluca Zonzini, Marcela Dojtman y Tomás Deías Spreng) viene trabajando en relación a la poesía con textos del mismo autor en una primera obra más pequeña llamada “Veranito de San Juan”.

“Con Gael fuimos compañeros en la escuela de dramaturgia. Venía leyendo su poesía y quería probar algo muy específico de la poesía en el cuerpo, como una forma de estar en el espacio, y pensé que un recital de poesía habilitaba eso. Lo montamos, por primera vez, un verano en un ciclo de pocas funciones. Pero nos gustó tanto que queríamos seguirla, nos entusiasmaba. Y queríamos agrandar el material” (Alberto Antonio Romero, Director).

La obra, fuertemente centrada en una estética noventosa tanto por la música como por los colores, la vestimenta y las imágenes que el elenco despliega en escena, es una performance que toma vida a medida que lo propios actores van encontrando nuevos sentidos en el espacio que van ocupando. Es poesía oral y es poesía viva que late en cada uno de sus cuerpos. Son dos discursos, uno racional que grita “ni con palabras construyen hogares / ni con palabras se sobrevive / ni con palabras matan el hambre”, y otro más irracional y descontracturado que emerge constantemente en las posiciones de los cuerpos, en los bailes salvajes y en los sonidos que interrumpen la obra. Esos dos niveles de discurso se unen constantemente y confluyen hacia un mismo lugar como si quisieran llegar al mismo punto y reencontrarse en un abrazo después de un largo andar.

“Malviaje lo empecé a escribir en el 2009. Era un diario de viaje. Lo escribía en un cuaderno que en el medio del viaje se fue autodestruyendo y no me quedó nada de eso. Lo fui transcribiendo y fueron 6 años de corrección y trabajo, no seguidos sino intermitentes, sobre todo con el verso para que se pareciera cada vez más a sí mismo”. (Gael Policano Rossi, escritor)

El texto de Gael es un viaje que fue y que sigue siendo; es un camino que avanza hacia un futuro que no deja de mirar al pasado; un viaje que transforma, que va tomando forma como lo moldean los actores en escena, siempre igual y siempre distinto a la vez; un viaje que fluye como un río que va arrastrando los pesados escombros de una vida pasada y los recuerdos de una lejana infancia: “Miro el cielo y veo un dibujo / que me dice qué tan lejos puedo llegar / y sospecho que mi futuro / está escrito en mi pasado”.

“Mi primer libro es «Vosiyo» (publicado en 2009 y reeditado en 2012) y Malviaje es mi segundo libro. Me dio mucha fe que Beto (Director) tenía la voluntad de dirigir algo diferente, leyó mis poesías, y encajó. Yo no estuve en los ensayos, no fui consultado, y a mí me parecía que mi ausencia estaba buena para ver lo que era Malviaje por fuera de mí. Que se expandiera.  En vez de que te digan “buen viaje”, tenés un malviaje. De esa experiencia sale esta reconstrucción de un diario, de un encuentro con mi ciudad natal, que es la ciudad de Córdoba. Toda esta distancia entre aquél aeropuerto en el que lo escribí y lo que es la obra ahora, es una locura. El artista necesita tomar distancia. Y ahora está toda esta gente que nació en los ‘90 y se apropia de este material de una manera particular, desde su propia experiencia, y siempre hay como una voluntad más allá de la poesía, que sigue siendo la minoría de la literatura, que la lleva fuera de los límites del libro. Y es lo que le permitió a este espectáculo ser”. (Gael Policano Rossi).

En una charla exclusiva con el elenco de la obra para “La Primera Piedra”, los actores cuentan qué significó “Malviaje” para cada uno de ellos:

Marcela Dojtman:

Marce

A mí me parece que fue algo más allá del texto. Algo que a Beto lo convocó, también. Al tener el material, nosotros lo fuimos haciendo carne cada uno a su manera, y empezó siendo Veranito de San Juan, pero terminó siendo, a veces, un “Malviaje”. Fue re intenso por muchos motivos. Pasaron cosas que cada uno fue viviendo a su manera. Yo, en una función, me lastimé y en dos funciones siguientes estuve con una faja, pero la obra funcionaba igual porque había algo del material que lo permitía. Realmente es un viaje que se va haciendo. Y en cada función se descubren nuevas cosas, se encuentran nuevos sentidos. Además hay algo de la época en la que esto sucede, algo del transcurso de ese viaje en los ’90, que a mí me toca. Yo atravesé esa infancia de manera entera”.

Gianluca Zonzini:

Gianluca

Esta es la primera obra que hago por fuera de un lugar seguro, y me trajo a un elenco muy cálido con el que uno se lleva una obra al hombro más allá de los lugares asegurados que uno ya tiene. Y aparecieron estas personas en mi vida y el texto de Gael que lo leí un verano en Bariloche, todos tenemos algo con el sur, y todo el tema con el padre me hizo acordar a mi relación con mi viejo. Aunque no fue un padre ausente, como ese del que habla Gael, coincidió con un momento mío muy personal en el que sintomáticamente las cosas de afuera empezaron a tener que ver con esa relación de padre e hijo y la aceptación de una sexualidad. Entender que hay tantos géneros como personas, aceptar que las cosas pasan por algo, y que uno las atrae. Y yo mismo en la obra, a la vez como algo serio y no, me voy transformando en travesti, y está también esa discusión. Y fue pensar “bueno, esto habla mucho más de mí de lo que pienso”, y saber que nunca lo hacemos de modo solemne. Y también está eso del “Malviaje” siempre presente. Somos como el “Macbeth” del under porque Macbeth siempre tuvo fama de ser una obra maldita, pero creo que con un fin sanador”.

 Tomás Deías Spreng:

Tomás

A mí me cambió la vida. Me reencontré con Beto en otro lugar, para hacer una obra en Buenos Aires, por fuera de Esquel, y me llevó a conocer a todas estas personas y a formar una familia. Nos queremos un montón. Y toda mi vida está transformada en base a eso. Y en cuanto al texto, te pega de acuerdo a lo que vos viviste. Tengo un padre no necesariamente ausente, pero si en el sentido de que hay una madre muy fuerte, y lo loco es eso, que los textos te tocan y son cosas que te pasaron, te pasan, y te siguen repercutiendo”.

Ana Capalbo:

Ana

Para mí, Malviaje es una obra muy buena, y la llenamos de corazón. La hacemos con un montón de amor. Una amiga que la vio me dijo que no podría estar otra persona que no fuera yo ocupando ese lugar que ocupo en el escenario. Y así lo siento. Y pasa con todos. Cada uno está donde tiene que estar. Cada vez que termina la obra, yo quedo destruida, porque en cierto modo “pega como un malviaje”, malpega, porque toca muchas emociones y escarba en la sensibilidad. Es una obra muy emotiva, me sensibiliza mucho, y yo ya de por sí soy muy sensible. El amor es un malviaje”.

Próximas funciones:

Viernes 23 hs

25 y 2 de octubre en el CEPA, Hipólito Yrigoyen 1173

23/09, 30/09, 6/10, 13/10 en La Casona Iluminada (Av. Corrientes 1979)

Ficha técnica:

Textos de Gael Policano Rossi

Dirección: Alberto Antonio Romero

Actúan: Ana Capalbo, Tomás Deías Spreng, Marcela Dojtman, Gianluca Zonzini

Iluminación: Compañía de Producción Lumínica

Fotos: Luz Soria

Calor de la entrada $80 (incluye el libro de poesías de Gael)

Se los puede encontrar en:

FB:  https://www.facebook.com/malviajerecital

FOTOLOG: http://www.fotolog.com/fletesgustavo/

 

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